CCISETA Puno

Gran movilización por la defensa de los bosques totorales y el Oro Azul

Gran movilización por la defensa de los bosques totorales y el Oro Azul
16 de Noviembre del 2004

Por: Fortunato Escobar
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<< El poder de “policía” se presenta como una administración que, junto con el poder judicial, el ejército y el tesoro, dirige el Estado. Es verdad. No obstante, es un poder que abarca todo los demás. Turquet lo expresa así: “extiende sus tentáculos y penetra en todas las condiciones de las personas, en todo lo que hacen y en todo lo que emprenden, su campo de acción comprende el plano judicial, el de las finanzas y el ejercito”. La policía incluye todo. >> Michel Foucault

En uno mis artículos anteriores referido al tema preguntaba “¿Por qué resurgían los Conflictos Socio Ambientales en los pueblos de los Totorales?: el caso de los Uros y los Ramis de Puno Perú.” Dije entre otras cosas que el corazón mismo del resurgimiento de los conflictos socio ambientales, estaba en la controversia de las leyes controlistas, que intentaban someter a los más débiles como parte del proceso de disciplinamiento; de esta forma, continuar construyendo la brecha social, cultural y de género, que en si, es el menoscababa de lo consuetudinario .

Mencioné también, que estaba presente el imaginario de los primeros años de la Reserva Nacional del Titicaca (RNT) administradas por el Centro Nacional Forestal (CENFOR) que actuaron con una actitud psico social atemorizante, racista y policíaca con la requisa de sus instrumentos de trabajo; para el colmo exigiéndoles el pago por el uso de los recursos del lago Titicaca cual se fueran dueños de la totora y de demás recursos acuáticos.

Hoy el nuevo Jefe de la RNT pareciera actuar bajo el mismo imaginario. Al menos eso se evidencia en una carta enviada al Alcalde del Centro Poblado de Uros Chulluni (Carta remitida por Jefe de la Reserva Nacional del Titicaca fecha el 17 de setiembre del 2004), en el que aprecia una clara amenaza con ordenar que dentro de 72 horas restablecer los paneles e iniciar el mantenimiento de los bienes patrimoniales de la RNT existentes en el Puesto de control de la Isla Joroba. Pregunto ¿desde cuando son dueños o cual es la razón de tal atribución?.

La versión oficial de los agentes de la RNT se reafirma en una entrevista publicada en el Diario Correo de Puno publicada el 01 noviembre del presente año. Cuando menciona “que el pedido de los isleños no tiene ningún asidero, por tanto, no podrá ser complacida (…) como capricho de pocos”(pag.6)

Estas actitudes, me hacen recordar a los sucesos ocurridos en los primeros años de la RNT, en el que se actuaron con actitudes amenazantes e intimidatorias, allá por años 1975-1978 y 1979-1984. Los primeros intentos de declarar como reserva ecológica a los totorales del Titicaca, 18 comunidades de los distritos de Acora y Ilave salieron al frente conformando una poderosa organización denominada “Liga de la Defensa de la Totora” (LDT), después de una multitudinaria movilización por la “Defensa de la Totora”. Los campesinos/ indígenas de esa fecha emprendieron una dura batalla administrativa y legal al enterarse de las intenciones del Gobierno acerca de la dación de una Ley que prohíba el corte libre de la totora, argumentando que la totora no es una “planta silvestre”, sino una planta sembrada por sus antepasados y por ellos mismos quienes sembraban, renovaban, resembraban, conservaban, y los veneraba desde tiempos inmemoriales como parte de ellos mismos, como símbolo que ambos se necesitan para purificar las aguas del Titicaca.

Dentro de los procesos conflictivos, los campesinos agrupados en la LDT, en marzo de 1977 irrumpieron en una masiva movilización la reunión del Ministro de Agricultura, que estaba en una diligencia en la hacienda expropiada de Ilpa, (comunidad que pertenece a Paucarcolla a 11 km. de Puno) para hacer sentir su protesta respecto a la aludida “Reserva Ecológica” amenizándolo al Ministro con secuestrarlo, quien se comprometió a estudiar las demandas. Pese a ello, el Gobierno Militar califica a los actores agrupados en la LDT de extremistas, opuestos al curso de la reforma agraria en Puno. Pese a ellos, los indígenas amenazaron con radicalizar sus demandas.

A raíz del protagonismo de la LDT, en marzo del 1977, el Ministro de Agricultura, con el objeto de terminar con los levantamientos campesinos y los conflictos, emitió una Resolución Directoral, autorizándolos la cosecha de totora conforme como lo habían hecho siempre los campesinos, con lo que acabó parcialmente los conflictos, pero sin que resulte satisfactorio para los demás actores, como los Ramis. En suma, lograron ser excluidos dentro de la declaratoria de la Reserva Nacional del Titicaca (DS. 185-78-AA).

Pese a los levantamientos indígenas y ahora sin la participación de los radicales de la LDT, la parte norte del lago Titicaca fue declarada como la RNT (1978). Conocido esta normatividad, las comunidades del sector Ramis levantaron su voz de protesta, para ello constituyeron el “Frente Campesino de la Defensa de la Totora” (FCDT), muy parecido a la Liga de la Totora de la zona sur, con el que presionaron al gobierno para que derogue el DS 185-78 con argumentos similares a los de la LDT.

Es así, la evolución y exacerbación de los conflictos socio ambientales (1978-2004) tienen una laga data (26 años), donde los primeros agentes de RNT administradas por CENFOR al que reitero que se caracterizaron por fuertes campañas represivas e intimidatorios de carácter psicológico represivo, racista- policial, con el propósito de someter a las comunidades a cualquier costo y tomar el control absoluto de manejo de los totorales, obligándoles a firmar los contratos de uso previo pago de tarifas establecidas. Los que cesan, únicamente cuando los agentes del CENFOR son expulsados por las mismas comunidades del Sector Ramis bajo la amenaza de voltearles sus camionetas al tiempo de pretender apedreados sin tener que responder por sus vidas. Años más tarde, dichos agentes abandonarían sus métodos represivos para pasar a una actitud pasiva y resignación.

A pesar de los años, la actitud de los comuneros de Ramis no ha cambiado, sino que esta persiste como si los hechos hubieran ocurrido recientemente. Consecuencia de ellas, el ingreso de los agentes de la RNT y el INRENA hasta la fecha están prohibidas, sus autoridades tradicionales (Jilakatas) se encargan se custodiar todos los accesos al sector Ramis para que no ingresen extraños, (Caso curioso pasó con mi persona cuando realizaba mi investigación y hasta el final de mi trabajo etnográfico no pude ingresar, a pesar de todos los intentos).

Es por ello, que reitero que las actitudes erróneas del pasado están presentes, y sobre todo, la acción psico social atemorizante, racista y policíaca que pretende hacerlo el nuevo Jefe de la RNT. La lectura de los conflictos ambientales y sociales se repite y se exacerba. Donde los “Isleños de los Uros” como los llama las voces oficiales de la Reserva, cambian de discurso ante la negativa de concederles por propia voluntad de ser una “Reserva Comunal”. Al que ahora, propician junto al Sector Ramis la derogatoria del DS. 185 -78-AA.

La negativa de que la comunidad Uros Chulluni tengan su propia “Reserva Comunal” dentro de la RNT del Titicaca ha sido denegada tantas veces y desviadas sus atenciones a la solicitud de ser “Reserva Comunal” por cerca de 25 años, al que recientemente el Jefe de la RNT menciona “que no podrá ser complacida como capricho de pocos”.

¿Por qué los agentes de la RNT señalan como capricho de pocos? ¿Es de pronto el pedido de la comunidad de los UROS resulta paradójico?. Lo único claro y contundente es que los Uros han convivido flotando sobre las aguas del Titicaca por siglos. De conformidad al derecho internacional, esta es su territorio y nadie puede predisponer sobre lo que deben o no deben hacerlo.

Sin embargo, las recientes actitudes amenazantes y policíacas responde al un débil ejercicio de “poder” amparado en una norma que denigra la cosmovisión local. Para ellos, la autoridad administrativa, no ha dudado en influenciar a los otros involucrados en la RNT en todo lo que hacen y emprenden su imaginario exclusión del aprovechamiento de los recursos de la RNT, quienes el 08 de noviembre se movilizaron contra la creación de la “Reserva comunal”, porque esta supuestamente afectaría sus propiedades ancestrales. Lo paradójico, es que la comunidad de los Uros solicita ser como Reserva Comunal que involucra sólo su área ancestral excluyendo las otras áreas que no tienen influencia. Por tanto, porque las otras comunidades se oponen a la creación de la reserva comunal. Obviamente es resultado de la influencia de ese débil ejercicio de poder.

Y es más ¿De donde sale el discurso que la gente de los Uros quieren las otras propiedades que no son de ellas?. Obviamente, esta parte de la estrategia inventada por la autoridad administrativa que se resiste perder ese “débil ejercicio de poder”, para los cuales utilizan campañas del nefasto pasado calificando el pedido de los Uros como “capricho de pocos”. Con el objeto de minimizar sus interferencia e de invisibilizar su existencia étnica.

Considerando, que la vigencia de la RNT que cuenta con financiamiento internacional de canje por deuda externa, las comunidades involucradas a la RNT han sido tomadas sólo como “objetos de política” y ahora los prenden usarlos sus vidas como “objeto de poder” en contra de las otras comunidades.

Estas actitudes, sólo logran exacerbar los otros conflictos ambientales y sociales no solo con el Gobierno sino extenderlas a otras comunidades involucradas en la RNT, por el deseo de libre acceso y control de los recursos de la RNT, aún cuando la sostentabilidad de la misma es incierta.

Considerando que la “Reserva Nacional” no reportó ni reporta beneficio alguno, ni en lo socioeconómico ni en lo ambiental, mucho menos en lo humano y cultural. Sino todo lo contrario, denigra aún más la pobreza dentro de otros pobres, excluye más dentro de los otros excluidos.

Por consiguiente, estas son algunas de las consideraciones por las que se prepara la gran movilización por la defensa de los bosques totorales y el Oro Azul a llevarse acabo el miércoles 17 del presente con la participación de todos los usuarios de los totorales de la Cuenca del Titicaca desde Acora a Huancané.

La movilización no es contra de la conservación, uso racional y el acceso justo y equitativo entre todos los hombres y mujeres que conviven los totorales y las aguas azules del lago Titicaca. Sino todo lo contrario. Dado que al volver al imaginario del pasado, se vuelve a intentar imponer principios ajenos, que distan largamente de sus sistemas de creencias y valores socio culturales. Es decir, que para el manejo de áreas protegidas como el Titicaca sólo ha primado el criterio biológico sin tomar en cuenta lo humano, cultural, espiritual y social.

Como conclusión, debo manifestar que para nuestros pueblos. El acceso y control de los Recursos Naturales del lago Titicaca y demás ecosistemas del altiplano es, al mismo tiempo, un “derecho” y una “responsabilidad”, como principio de dualidad. Un derecho por nuestra continuidad histórica y cultural; y es una responsabilidad, una obligación moral usar racionalmente y conservarlos para nuestros hijos y para el futuro de la humanidad. Por tanto, no sólo ansiamos un mundo justo y equitativo; sino sobre todo, valoramos y conservamos a nuestra Pachamama y la Qutamama por ser nuestra forma de sentir, pensar y actuar que ella “cría a quienes lo crían.

Los recursos naturales, entre ellos el Oro Azul (aguas del Titicaca) tienen un valor económico, social, ambiental y sobre todo es el ente relacionador intrínseco no solo material sino espiritual/ cultural. Por tanto, toda actuación sobre ellas, debe tener en cuenta esta cuádrupla dimensión, dentro de nuestra convivencia entre la diversidad, la solidaridad y la reciprocidad como principios fundamentales, no sólo la sustentabilidad de la vida humana sino todo cuanto existe en la naturaleza (visión holística y sinérgica de conservación).

Territorio de los Aymaras y Quechuas, Noviembre 16 del 2004